Aparco el coche en el portillo a la entrada del valle y bajo por al lado del bunker hasta el rio, lo cruzo y desciendo por la orilla izquierda del rio, enseguida encuentro buenos lugares con rocas con musgo a lo que se añade el hielo que se ha formado por las bajas temperaturas de estos dias. A causa de esto las piedras estan heladas y en mas de una ocasion he estado a punto de amerizar con tripode, camara y todo el monario en mitad del rio. Ahogarme no iba a ahogarme, pero el golpe no me lo quita nadie y seguro que la camara acabaría en siniestro total y a pesar que ya tiene unos años, le tengo bastante cariño a mi Olympus E-330, por cierto parece que corren malos tiempos para Olympus.
He aquí el resultado.
22 de Enero de 2012